yo quería, deseaba, necesitaba, no sé, soñaba, imaginaba casi siempre, que la despedida fuera porque yo me hacía vieja y a vos te quedaba todavía la vida que a mi ya me había vivido, con otros sueños, si; y otras aventuras, acaso amores nuevos o un amor, que te distrajera de mí y entonces.
que porque aún escuchabas, pasado el tiempo, músicas que a mí me confundían el paso y a vos te movían pensamientos y sentires en ritmos que me eran ajenos. esas cosas que parecen caminos encontrados y son encrucijadas.
que porque yo miraba películas de amor con finales felices y vos navegabas en un eter de redes sociales y mágicas tecnologías a las que mi mente se resistía con aplicada rebeldía.
no hablo del amor. no digo la pasión entretejida en amaneceres y risas. descubrimiento de senderitos a los que no me hubiera atrevido sin la divertida guía de tu atorrantura libertaria.
no hablo del amor ni del romance con un Eros que convertiste en el Jano que siempre sos, nacido en enero, (mirá vos qué especial coincidencia).
ni los hablo, ni los nombro, porque siempre serán aquellos besos que nos besábamos en los marcos de las puertas, para cuando la realidad fuera un terremoto arrasador y sólo quedaran en pie la puerta y el marco. nuestro sexo embesado, te acordás. nuestro amor ensexado de puro embeleso.
y entonces, Jano. el de las puertas y los finales. fuiste sin saberlo, pero ahora que lo pienso, lo siento, lo lloro en el desembeleso.
como fué que la rutina de las repitencias me embaucó, aunque era yo una amazona vigilante de tu mirada y el camino de tus caricias. y la luna. tantas veces la luna.
sin embargo el adiós fue la tristeza, la rabia de marcos y puertas asoladas. el llanto escondido y el proclamado. pero más que nada la tristeza, el límite.
hay, entre todas mis memorias, la que se ha perdido irreparablemente: ya no me verán "bajar a aquella fuente ni el blanco sol, ni la amarilla luna."
por esta tristeza, que no nombra al amor, ni a la irredenta pasión, ni al embesado embeleso.
ay! más hablares escritos en lo de Rossina / Rochies
Los adioses de tristezas dejan huella profunda y a veces no sanan nunca.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Miralunas,
ResponderEliminarA mi me embelesó el fluir de tu escritura... el erotismo y la lujuria del verbo... mezclado con la romántica tristeza de ese desamor que pone límite al amor...
Precioso, extraordinario texto.
Felicitaciones sinceras.
Muac
Con el permiso de Sani, casi copio y pego su comentario, que se asemeja a lo que pienso, después de leerte.
ResponderEliminarBellísimo texto, realmente.
Besitos.
¡Ay!
ResponderEliminarAbrazo.
Soberbia urdimbre de palabras lamentos, recuerdos, ! adiós, ay! Jano tiene dos caras, una mira al pasado, la otra al futuro, ay, los marcos y las puertas, si hablaran tan bien como tú lo haces, se saldrían de sus paredes y quicios. Besito y felicitación.
ResponderEliminares raro que yo venga a un blog compañero esperando x ó y...normalmente, aunque ya nos conocemos en nuestras maneras estilísticas y de fondo, es raro que yo venga predeterminado a leer esto o aquello. pero se ha dado el caso de que hace poco te leí un texto genial. este recuerdo se me puso de frente y así afronté el inicio de a lectura...sabes, miralunas, ni me ha defraudado la esperanza ni mucho menos. diría incluso que me has dejado pegado a las frases, al conjunto del texto.
ResponderEliminary dos curiosidades que se resumen en una: ¿la utilización del dios JANO implica que tienes conocimientos de la antigüedad romana? por que el EROS no me sirve...no sé, una curiosidad...
medio beso.
Y pese al desasosiego, se disfruta tu texto, tus exquisitos neologismos, tu ritmo de relato que me encanta. Y gracias por tus elogios, son muy grandes que no sé si me caben. y gracias por tus textos, también. Besos.
ResponderEliminarLos mecanismos del amor suelen resultar crueles, sí, al final crueles aunque se disfracen de ternuras, tras las experiencias conviene decidir el mejor sendero..... normalmente lo elige la biología al margen de la emoción. Bss.
ResponderEliminarAy, por todo aquello/aquellos de los que nos despedimos definitivamente sin saberlo. Ay, el momento de descubrirlo. Espléndido texto, como vibrando al borde de una cascada.
ResponderEliminarUn abrazo!
Qué bonito! Engancha con el ritmo, musicalidad y belleza!
ResponderEliminarMe quedo con la atorrantura, que me ha encantado!!
Genial!
Un beso!
Ay! porque quiero acompañar tu tristeza.
ResponderEliminarBellísima forma de narrar.
Un beso.
Veo que Cecy se me adelanto.
ResponderEliminar!AY!
es lo que me nace, desde lo mas hondo.
Un abrazo.
Las palabras del dolor y la incertidumbre, son las que por lo general, nacen más puras y dulces. Puede ser una contradicción, pero esa mezcla de emociones sentí en tanto te leía.
ResponderEliminarBesos!
Gaby*
De tu bellísimo texto , triste y doloroso, me quiero quedar con una expresión que me ha impactado: "Te quedaba la vida que a mí ya me había vivido". Siempre pensé y sostuve que vivíamos la vida y tú me cuentas que la vida nos vive a nosotros. Tendré que reflexionar sobre eso.
ResponderEliminarUn abrazo.
Poca gente sabria pintar la tristeza y el desamor de la forma que lo has hecho. Tu relato es para leer varias veces y en cada lectura encontrar nuevos matices para engancharse. ¡Ay!
ResponderEliminarBesos
EL amor que lo llena todo y cuando se convierte en desamor deja un vacío importante y una tristeza profunda. Bonitas aunque tristes palabras, se agarran dentro, amiga
ResponderEliminarBesos
He dado mis primeros pasos por tus laberintos, he espiado por las ventanas en donde tus palabras se mecen entre visillos de ensueños y he visto vida, emoción , ternura, sensibilidad. Me he sentido cómoda en tus rincones arropada por historias que nacen desde el alma.
ResponderEliminarPrometo seguirte,simplemente por que creo que en algo coincidimos.Acaso en nuestra capacidad para soñar despiertas.
Un abrazo
Maravilloso!!! Por favor como me gustó leerte esta semana!!!
ResponderEliminarTu texto es intenso, nostálgico, con un halo de tristeza y dolor.
El amor, tan difícil de sostener a pesar de ser alimentado, tantas veces se convierte en rutina, en vacío.
Un abrazo enorme!!!
Me ha gustado mucho muy buen relato hablando de amor, de pasiones y desencuentros excelente escrito
ResponderEliminarSentida confesión de incompatibilidades, a pesar de todo. Un mar calmado de paz frente a una tempestad llena de vida.
ResponderEliminarMuy amoroso.
Besos
Esas imaginarias conversaciones con alguien, tan imposibles de llevar a cabo. Las reflejas bien en tu relato.
ResponderEliminarBesos.
Cuando el amor se termina, se va o se muere queda esa sensación que es un poco indescriptible. Desembeleso es una palabra interesante.
ResponderEliminarMuy bueno lo suyo.
Un saludo.